Por Melina Ortega.
“El dinero y el amor no se
mezclan”, reza un conocido dicho. Y es que de por si es complicado manejar cada
asunto por separado, mantener unas finanzas sanas, al mismo tiempo que se tiene
una relación personal exitosa, pero cuando ambas se mezclan, ocurre una
interesante combinación, cuyos resultados pueden ser inciertos.
Hoy en día hay quienes están
haciendo buenos ingresos en la web, lucrando con el amor. Y es que los
corazones solitarios se han convertido en un negocio lucrativo, tan solo en la
web encontramos miles de sitios dedicados a “conseguir” pareja, mediante
programas de software que cruzan datos como gustos, pasatiempos, y todo tipo de
información que pueda ser de interés para alguien que busca conocer una persona
con la que sea “compatible”.
Lejos quedaron entonces, aquellos
días en los que se cruzaban miradas –hoy se cruzan datos, fotos-, se enviaban
cartas de amor –hoy existen los emails y los mensajes de texto-, antes los
hombres solían llevarle serenata a su pareja cuando querían demostrarle su
amor, hoy en dia basta con que coloquen en su muro de facebook algún enlace de
youtube con la canción que le quieren cantar virtualmente.
Y las reacciones de las mujeres
también se han ido adecuando para estar ad hoc con los tiempos, a ellas les
encanta que se les publiquen en sus perfiles las mismas cursilerías que antes
nos gustaba que nos dijeran cara a cara (pero frente a los demás).
Para enviar “flores” basta con
que se compren créditos en fb, y se pueden enviar miles de ramilletes al perfil
de la enamorada. Ella estará mucho más contenta de que se haga así porque, por
lo menos en el muro es garantía de que todos sus amigos y amigas verán el
amoroso gesto del pretendiente, en cambio, si solo se le enviaran flores
naturales a la antigüita a su casa, nadie tendría oportunidad de ver el ramo más
que su familia.
Qué curioso, pero parece que las
demostraciones de amor de hoy en día, mientras más públicas, deben considerarse
más sinceras; cuando antes las parejas lo que más valoraban era la privacidad,
los poquísimos momentos en los que su pobre intimidad los hacia robarse algún
beso en la oscuridad que da la sombra detrás de un árbol, en el zaguán de una
puerta.. “Procuramos el momento más oscuro para hablarnos, para darnos el más
dulce de los besos […]” canta Armando Manzanero en la canción “Somos Novios”.
Lejísimos quedaron aquellos
tiempos en los que el pretendiente iba a nuestra casa, pedía el permiso de
nuestros padres para salir con nosotros y el flirteo y coqueteo mutuo en la
escuela, están en extinción.
Los bailes, los paseos con tu
novio tomado de la mano y aquellas salidas al cine, han pasado a la historia.
Hoy dia, es tan real que una chamaca de México ande de “novia” con algún chico
de Alemania, gracias a las nuevas tecnologías, que se pelean y se contentan tan
seguido como si de verdad vivieran en la misma calle o fueran a la misma
escuela… de hecho, incluso con mayor frecuencia, pues antes en mis tiempos no había
celular y no estábamos “las 24 horas” viviendo un noviazgo como los de hoy, que
hasta estando en el baño se siguen mensajeando.
Citas Virtuales… ¿Una realidad
exitosa o un éxito “virtual”?
Hay muchísimas páginas web
dedicadas al negocio de las citas virtuales. De hecho, para efectos de este
articulo investigue y los números son tan altos, que las principales empresas
dedicadas a esta actividad son celosas de sus cifras por temor a que haya más
competencia.
Solamente encontré algunas
estimaciones de ciertos sitios, por ejemplo, se según Comscore.com, hay 20
millones de personas buscando parejas por internet. En Europa, su facturación
por tales servicios alcanzó la cifra de 243 millones de Euros en 2006 y se
espera que esta siga subiendo para los siguientes años.
Y es que la ventaja de efectuar
la búsqueda en la web a través de estas agencias y no en persona, como antaño,
radica en que puede hacerse de manera anónima; prestándose a buscar
discretamente parejas homosexuales o bisexuales, sin necesidad de frecuentar
sitios en persona, sometiéndose a las críticas de la sociedad. En pocas
palabras, “las personas pagan por encontrar una pareja”, sea cual sea el motivo
y el objetivo; aventuras pasajeras o sexuales solamente, un noviazgo o incluso
una relación matrimonial con hijos y toda la cosa.
En la mayoría de los sitios,
subir tus datos es gratis. Pero al estar navegando, querer acceder a otras áreas
y funciones específicas, empiezan a cobrar tarifas de entre $30 y $600 pesos,
teniendo opciones de hacerlo mensual, trimestral o anualmente. Los avances cada
vez mayores en la tecnología y el acceso a internet de cada vez más personas,
hacen más fácil la expansión de este mercado.
Pero además, cualquier estimación
puede quedarse corta, debido a que no se pide Identificación para accesar y que
el estado civil no importa, pues cualquier puede hacerse pasar por otra
persona, mientras pague su cuota.
Basta entonces con comprar un
dominio, hacer la web, comprar el software y empezar con la mina de oro. Claro
que, para que valga la pena, se deberá invertir en publicidad.
En el segundo caso de Negocios de
Amor, podemos ver que cada vez hay más páginas dedicadas a la venta y entrega
de regalos y detalle on line. Paginas en las que existe un catalogo de
productos que puedes comprar vía internet con tarjeta de crédito o debito, y
que la empresa se encarga de entregar en el domicilio donde tú lo indiques,
para quien tu quieras. Así te evitas la salida a la florería, a la boutique, a
la tienda de regalos, al restaurante, etc.
Claro que estos negocios van
dirigidos a un segmento de mercado específico: a las personas que tienen con qué
pagar electrónicamente. Si no puedes pagar online, no serás cliente, así que mi
publicidad no va dirigida a ti. Sin embargo, para alegría de muchos emprendedores,
tan solo en México, según cifras de la Condusef, hay 26.1 millones de tarjetas
de crédito, cifra nada despreciable para iniciar un negocio.
En el tercer caso, bajémonos de
la web y volvamos a la vida fuera de la red. Aun hay personas que todavía se
regocijan dando un regalo físicamente y para ellas, en estas épocas –como en
cualquier evento festivo familiar- vemos un sin número de puestecillos en la
calle, con la venta de regalos de San Valentín:
Ositos de peluche, tazas,
Chocolates, Tarjetas de Amor, Poemas, Flores y todo lo que se pueda obsequiar
para demostrar el amor que se siente por una persona es vendido en estas
fechas. Hay incluso algunos audaces que van más allá agregándole a su negocio
el servicio de entrega a domicilio: alguna persona disfrazada de Cupido es la
encargada de buscar al bien amado y entregarle, cantando, el regalo en
cuestión.
Los costos de hacer una venta
temporal así no son fuertes. La inversión se estima entre $1,500 y $3,000
pesos, dependiendo que vendas, donde te pongas y cuantos días lo hagas, porque
el permiso para colocarte en puesto ambulante va desde unas cuantas horas –como
los permisos de los puestos que se ponen en la revisión de la Baja 1000-, hasta
algunos semanas, para los que se ponen todo el mes, además, el costo depende
también de la zona donde te quieras poner, siendo más costosa la zona centro.
Y lo que vendas, pues será cosa
de que decidas que será: pueden ser flores, tazas, chocolates, ositos de
peluche, cojines, perfumes, etc., etc. El límite lo pones tú, y obviamente lo
que más te conviene es comprar barato para que tengas mayor margen de utilidad.
Recuerda que es época de crisis y
la clave para vender mucho es tener buen precio. No olvides que los mejores
clientes del día de San Valentín son jovencitos que aun no cuentan con ingresos
propios y debes tener precios adecuados para ellos. Como dice mi mama “todos
tienen su corazoncito”.
¡Feliz Día de San Valentín a
todos!
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